Acaban de mandarme en una de las redes sociales una página que ha conseguido sacarme una gran carcajada...
"Médicos sangre sucia: Médicos cuyos padres no lo eran, y nos sentimos desplazados cuando los profesores nos recomiendan que cualquier Harrison o cualquier Sobotta viejo que tengamos en casa nos valdrá..."
Efectivamente, se puede decir que yo también soy "sangre sucia" y no es ninguna deshonra. Adoro a mis padres; no tienen estudios; son humildes trabajadores desde que eran unos niños. Me han enseñado a valorar cada una de las cosas que se ganan con esfuerzo. Me han educado de una manera ejemplar. A ellos les debo todo lo que soy, y donde estoy. Con su sacrificio diario han hecho posible que yo pueda estudiar lo que siempre me ha gustado... Me apoyan incondicionalmente con todo su cariño... Se sienten orgullosos de mi a cada paso que doy...
Es cierto que en mi casa no ha habido ningún libro de medicina que pudiese servirme... aunque ahora que recuerdo... hay por aquí una "Guía Médica" de la década de los 80 con muchas fotos que recuerdo haber visto de pequeña varias veces con mis padres... :)
Quizá no han podido ayudarme con las tareas del colegio... ni con los trabajos de Historia, ni con las ecuaciones y mucho menos con la gramática... Lo he tenido que hacer sola... Pero seguro que no lo habría logrado si no hubieran estado a mi lado en todo momento como han hecho. Siempre han estado ahí. Recuerdo que cuando tenía que aprender las tablas de multiplicar, me iba con mi madre a la cocina y mientras ella hacía la cena yo se las recitaba una a una... Cuando tenía que hacer trabajos me compraban miles de cartulinas de colores para que eligiera el color más bonito para la portada... y mi padre siempre me daba ideas para hacer un dibujo precioso... ¡Qué bien dibuja mi padre! La verdad es que si hubiese tenido oportunidad se le habría dado muy bien la pintura. (...) Y decidí estudiar Medicina. Y ahí estuvieron ellos apoyándome día tras día hasta que logré entrar en la facultad. No me ha faltado nada:
- "Hay un atlas de anatomía que me encanta, lo he cogido de la biblioteca, es un poco antiguo pero está bien, mirad!"
- Qué bonito... cuántas fotos... ¿Cómo se llama?
- Sobotta.
3 días después tenía un Sobotta de la última edición encima de mi escritorio... Y muchas historias similares...
Sí... no me han podido resolver las dudas de Bioquímica, ni los problemas de genética... No saben lo que es la Anatomía Patológica ni para qué sirve... No me importa, para eso hay libros, tenemos internet.. y por supuesto están los profesores que es su trabajo... Pero mis padres me escuchan cada vez que les cuento una anécdota nueva, se alegran cuando les digo que he aprendido algo apasionante, me abrazan si vuelvo llorando porque he suspendido una asignatura y se enorgullecen al verme superar por mí misma cada obstáculo que se interpone en mi camino. Por ello, me siento la estudiante de medicina más afortunada del mundo.
Orgullosa de ser "sangre sucia" (aunque yo creo que tengo la sangre más limpia, azul y noble que nadie en el mundo)
Mamá, Papá, GRACIAS.
Foto añadida: Septiembre 2012 Graduación Medicina UAM |
qué bonito! :)
ResponderEliminarsaludos de otra "sangre sucia" xD (y a mucha honra!! ^^)
Preciosa la entrada, sé lo que siente. Sin mis padres no habría conseguido nada, aunque a veces no sean capaces de entenderme. Un saludo.
ResponderEliminarMimi!!!!!!! que bonito!! la verdad, leyendolo me has echo que pensar.. los padres son aquellas personitas que nunca nos abandonan y siempre estan ahi con sus ocurrencias, defectos y sobre todo detalles, pero lo mas importante que cuando los necesitas ahi siempre esta. A mi mis padres tampoco me pueden ayudar a resolver matrices Hessianas o ecuaciones diferenciales pero estan ahi.
ResponderEliminarHola Miriam :)
ResponderEliminarBienvenida al mundo blog, verás como en seguida te engancha. A mí, de momento, ya me ha enganchado el tuyo y más esta entrada: efectivametne, aquí otra "sangre sucia" de unos padres que ni siquiera terminaron la educación básica... y bien orgullosa que me siento!!
Un besazo!!
Muchas gracias de verdad. Me hace tanta ilusión recibir estos primeros comentarios de las autoras (en este caso) de los blogs que sigo...
ResponderEliminarUn abrazoo
Una entrada preciosa...
ResponderEliminarLa verdad es que pocas veces nos paramos a valorar "de verdad" todo el esfuerzo que han puesto nuestros padres para que lleguemos a estar donde ahora mismo nos encontramos... y todas esas cosas que nunca, jamás, podremos llegar a pagarles de vuelta, de ningún modo. Gracias por recordarnos que, aunque muchas veces desapercibidos, nuestros padres nos han dado todo lo que han tenido en su mano. Gracias :)
Un besazo
Miriam,
ResponderEliminarLa verdad es que los médicos sangre sucia no lo tienen fácil frente a los hijos de los cátedros. Pero en cuanto sales de la facultad y te enfrentas a la vida real nadie se acuerda de tu padre o tu madre (salvo cuando metes la pata, se acuerdan en otro sentido, claro!).
Igual pasa con los grandes libros de la facultad: cuando te das cuenta de que la respuesta a lo que le pasa al fulano o qué hacer con fulana no la tiene el gran harrison, te acuerdas de los grandes cátedros que no querían salirse del guión recomendando "que la verdad está en los libros".
Grandes paradojas entre los mundos de yupi y la vida real.
Saludos y bienvenida a la blogosfera sanitaria, si ésta existe.
mimiiiiii k me as exo llorar jodia!!!!!! yo tb ty orgulloso de ser sangre sucia y de los valores k me an enseñado mis padres!!!! tk pekeña!!!
ResponderEliminarPD: soy gabry XD
Gabriiiii!!!! :) Yo también te quiero mediquitooo! Nos vemos en Septiembreee!!! (si viene antes avisa ehh) Muakssssssss
ResponderEliminarMiriam, he llegado aquí por pura casualidad, pero la verdad es que leyendo lo que has escrito se me han puesto los pelos de punta! Parece que estés describiendo mi vida! Acabo de empezar 1º de Medicina, y verdaderamente mis padres, durante todo el laaargo proceso educativo, me han apoyado y animado en todo aunque muchas veces no entendieran bien, bien para qué. Y una no se para a pensar en la importancia de esas cosas hasta que le faltan o hasta que alguien como tú las describe con tanto detalle y sensibilidad. Siempre me he sentido orgullosa de ser una "sangre sucia" =)
ResponderEliminarEspero que sigas escribiendo, y mucho, y no dudes en que acabas de ganarte una fan-bloguera!Un beso!
Muchas gracias María! Me alegro de que te hayas sentido identificada de buena manera... somos muchos los "sangre sucia" que debemos ver las cosas positivamente :)
ResponderEliminarMuaaaaaks
ola!
ResponderEliminarbueno, yo me llamo Vir y estoi en 2º de bachillerato,mis padres al igual que los tuyos no tienen estudios, pero, por suerte, estoi mucho mejor educada que algunos hijos/as de catedráticos,profesores,politicos...gracias a ellos ahora soy como soy. Desde pequeña tuve la ilusion de ser medico, neurologa para ser exactos, y de momento voi por el buen camino...pensaba que era de las pocas personas que tenian el problema de que sus padres no les podian ayudar, pero ya veo que no!
me ha encantado el texto, de verdad.
besitos!
Me alegro Vir. Ánimo que ya te queda poco para cumplir tu ilusión.
ResponderEliminarUn beso
Me ha encantado, me siento totalmente identificada contigo ^^
ResponderEliminarDe todas formas, es innegable que algunos "sangre limpia" pueden tener algunas ventajas mucho más allá de los conocimientos que sus padres les puedan transmitir.
ResponderEliminarEjemplo: me sé de un compañero que aprobó cierta asignatura porque su padre, médico, conocía personalmente a uno de los profesores. Y vía telefónica, la cosa se solucionó rápidamente, el día antes del examen, aunque igualmente mi compañero acudió al mismo, pero me consta que no lo aprobó (tras salir, comparando sus respuestas con la plantilla corregida, no llegaba a un 5, cuando se necesitaba un 7).
Estudio Medicina y estoy actualmente en 4º...Ahora, gracias a Dios, no conozco a nadie que sea hij@ de...(de médico, se entiende) y que tenga cierto enchufismo académico, pero anduve 2 o 3 años de carrera aguantando comentarios cuanto menos "malolientes" de los profesores ante el cantoso apellido de una compañera de mi clase cuyo padre era un doctor prestigiosillo. Compañera que por cierto, quizá sea sólo cosa de mi mala idea, aprobaba casi sin dar ni chapa y dedicándole mucho más tiempo, a mi parecer, a la cafetería y las asociaciones estudiantiles que al ir a clase.
ResponderEliminarCosas así nos encontraremos toda la vida, ahora y cuando ejerzamos. Sinceramente, no aspiro a ser un Ochoa, ni un Fuster, sólo a hacer las cosas bien y sabiendo que me he esforzado. Tendré la conciencia tranquila por ello dentro de no muchos años, me queda la duda de que ese tipo de gente, "sangre limpia", esté en la misma tesitura que nosotros dentro de ese mismo tiempo, cuando toque hacerse valer por uno mismo.
Quedémonos con la idea de que tanto en medicina como en cualquier otra profesión, aunque sea injusto, el "enchufismo" va a seguir existiendo... Sólo nos queda pensar que si lo que hacemos, lo hacemos bien y por nosotros mismos, nuestra satisfacción personal va a ser muy grande :) mucho más grande que si nos lo dieran todo hecho.
ResponderEliminarY por supuesto que creo que a la larga... se notará...
he llegado tu blog xq un colega de la facultad tenia el enlace....
ResponderEliminarla verdad esq al leerlo se me han puesto los pelos de punto....
gracias Papas!
gracias Dra. Nova!
Fdo. una sangre sucia
Que entrada mas bonita, he acabado llorando y dandoles un abrazo y un beso a mis padres.
ResponderEliminarme parece patético que se distinga de "sangre sucia" y de "sangre limpia", Harry Potter ha hecho mucho daño porque me consta que eso antes no se decía, de todos modos solo quiero decir que tanto unos como otros somos estudiantes de Medicina y que por muy "hijo de" sobrino, nieto o lo que sea, si no vales no vales y ya está, por mucho "enchufismo" que puedas tener a lo largo de la carrera a la larga se ve quién vale y quién no, y más en una carrera como la nuestra.
ResponderEliminarHola Mimi!!!
ResponderEliminarSoy Oli. Lo primero decirte... arriba los sangre sucia!! Mi familia es obrera, de hecho mi padre es de campo y, al igual que los tuyos siempre me han apoyado en todo, han estado conmigo en los momentos mas felices y los mas tristes de mi carrera. Por cierto!! yo tambien me ponia con mi madre en la cocina a repetir las tablas de multiplicar! y cuando planchaba ella me hacia dictados jejeje. Nuestros padres no sabran sobre FA, TEP,... pero nos han enseñado algo que es mucho mas importante que toda la teoria y es el cariño, la humildad,a ser grandes personas no solo con lo intelectual sino tambien con el corazon, y eso nuestros futuros pacientes lo notarán.
y por ultimo... jodia que bien escribes!! Me ha encantado !!
Un besito grandote
:) Muchas gracias Oli! Muakssssss
ResponderEliminarMe ha encantado lo que has escrito¡¡¡¡¡
ResponderEliminarun saludo de otra "sangre sucia" :)
Ha sido más que genial la lectura, de veras. Cada palabra que has dicho... me temo (y he de confesar) que me has sacado una sonrisa a la par que alguna lagrimilla (debe de ser mi día sensible).
ResponderEliminarTú eres afortunada de tener los padres que tienes, pero me permito la licencia de decirte que ellos deben de sentirse (y seguramente se sientan) tanto o más afortunados de tener una hija como tú.
Espero que les hayas permitido leerlo. Sería un bonito detalle y, probablemente, uno de los mejores regalos que puedas ofrecerles.
Un gran saludo.
Fdo: otra "sangre sucia".
un texto genial, felicidades!!
ResponderEliminarGracias a todos! :)
ResponderEliminaray Mimi!!he entrado hoy por primera vez en tu blog y lo poco que he visto me encanta!!
ResponderEliminarescribes genial y todo lo que expresas me llega muy dentro!!no sé si es porque es Navidad, pero tengo un poco de secreciones saliendo de los globos oculares... =)
sigue así!!
un besazo muy muy muy fuerte!!
:) Un besito Alba!! Y ánimo que ya nos queda menos! ;)
ResponderEliminarHe encontrado está entrada precisamente en la página que nombras de las redes sociales. En mi clase a veces se nota demasiado eso de las "castas", pero realmente me hace sentir más orgullosa de mis logros "en solitario", es una sensación mucho mejor.
ResponderEliminarUn saludo de otra más, Rikku.
(Nuestro blog es el de tres sangre sucias orgullosas =D )
Ay por favor! has descrito mi situación totalmente.
ResponderEliminarMe encanta,un abrazo COMPAÑERA ;)
Buenas Miriam
ResponderEliminarTe felicito por tu entrada. He llegado a tu blog por casualidad y mentiría si te dijera que no me gusta. ¡Qué gran verdad has relatado! Mi hermana y una amiga, ambas estudiantes de Medicina, me contaron una tarde lo que eran los "sangre sucia". No pude si no soltar una carcajada debido a la bobada que me pareció.No entiendo esas distinciones. Yo he estudiado una carrera y en nigún momento me he sentido mal por no ser hija de Juristas, pero por lo escuchado, Medicina es diferente en todo, algo influirá que sois diferentes, algo debe implicar que nuestra vida esté en vuestras manos.
A la hora de la verdad, nadie os va a pedir la profesión de vuestros padres, sino vuestra pericia. Sospecho que si algún día apruebo las oposiciones, no les preguntaré a los Perito-Médicos que vayan a declarar al Juicio si son hijos de médicos o no.
Indubitadamente, lo vuestro es vocación real, no obligación.
Un aplauso para los "sangre sucia". Plas, plas, plas.
Un saludo.
Gracias Beatriz! :)
ResponderEliminarEs cierto lo que dices; al final nadie nos va a preguntar cuánto tardamos en hacer la carrera, si tenemos familiares médicos o no, etc... Lo que importará es como nos desenvolvamos día a día con los pacientes.
Pero hasta llegar a ese momento, los años de carrera se hacen durillos...
Un saludo!!
Dios, preciosa entrada.
ResponderEliminarYo voy a pasar a 2º de bachiller, pero desde que tenía 7 años quiero ser médica, salvar vidas, es mi ilusión en el mundo. Sé que si logro estudiar medicina voy a ser sangre sucia, pero me da igual, tengo un padre agricultor y una madre cocinera que vuelcan todos sus esfuerzos y me apoyan día a día en cumplir mi sueño, y se que cada cosa que haga va a ser por mi empeño, mi ilusión y vocación, no por seguir una tradición. Llegar hasta poder entrar en una universidad es duro, me imagino lo que sería estar en un sitio rodeada de gente que cuyas familias ya están en el mundo de la medicina, pero yo sólo digo que, grandiosa esta entrada, y que el empeño y la ilusión lo hacen todo posible, nada mas que añadir =D
Cristina.
Muchas gracias Cristina ^^
ResponderEliminarComo bien dices con esfuerzo y dedicación todo se puede conseguir. Mucha suerte en tu camino; estudia y lucha por lo que quieres :)
Un besito
Ayyy qué entrada más bonita!!! Me ha encantada!! Y si tus padres la han leído seguro que estarán contentísimos de lo q les valora su hija!!:)
ResponderEliminarBesos de otra sangre sucia:)
Gracias Ana! ^^
ResponderEliminarUn beso!!
Muy bonita la entrada =)
ResponderEliminarYo estudio Medicina en la Autónoma, en la Concha. Estoy ahora haciendo 5º de Erasmus en Roma.
Pero hay una diferencia entre Miriam y yo: mis padres son médicos, los dos. Y mi hermana se acaba de licenciar también. ¿Por eso tengo que entender que voy a ser un médico menos digno? ¿O peor? Quiero decir, que de ese grupo (no digo de la entrada, que ya digo que me parece super bonita, sobre todo para tus padres, Miriam), el concepto de coña me puede hacer también gracia. Pero me da pena que muchos miembros de ese grupo establezcan una especie de rivalidad absurda con quien es hijo de médicos.
Yo lo soy, y no tengo la culpa de que mis padres se conocieran precisamente en la Facultad hace mucho tiempo, y se enamoraran, se casaran y me tuvieran. Y da la sensación, por lo que mucha gente comenta en ese grupo y también por uno de los comentarios de por aquí en que hablan de "hijos de cátedros", que más bien sí, debería sentirme culpable; que los hijos de médicos que estudiamos Medicina somos una especie de ente privilegiada que no quiere tener compañeros o no quiere compartir sus "privilegios" (si es que los tenemos), cuando no es así.
Yo estudio Medicina porque me encanta, y porque - pese a que mi padre quería que estudiara Ingeniería - yo pensé que era lo que más me iba a gustar, y no me arrepiento, y según pasa el tiempo estoy más seguro de mi decisión. Pero además, yo he descubierto el osario con el que estudiaron mis padres Anatomía y se lo he dejado a una compañera de facultad; incluso he ofrecido a varios compañeros de clase venir al quirófano de mi madre los días que fuera más accesible.
Yo personalmente me siento injustamente tratado por esos prejuicios que existen contra los estudiantes de Medicina hijos de médicos. Yo he tenido que sacar la misma nota en Selectividad que todo quisqui, y la Selectividad es un examen anónimo en que nadie sabe quién eres ni de quién eres hijo, y cualquier seña identificativa te acarrea un 0.
Mis padres no son dos catedráticos pretenciosos que quieran colocar a su hijo en sus consultas privadas; de hecho, ninguno de los dos tiene consulta privada, ni la ha tenido nunca. E igual que los padres de Miriam, han sido gente humilde; cuando hacían los dos la residencia, viajaban en coche a Italia en un Renault 5 con otros 3 amigos de la facultad y dormían en campings bastante cutres.
En su caso, de hecho, el mismo mérito que les atribuyes, Miriam, a tus padres, se los atribuyo yo a mis abuelos por permitir que sus hijos fueran universitarios. Y estoy igualmente agradecido a mis padres, porque nunca condicionaron mi elección de carrera a nada, ni me prometieron nada, porque no me lo iban a poder dar.
Creo que, si soy estudiante de Medicina, lo soy como cualquier otro: por mis méritos. Y me parece injusto que se piense que es por algún tipo de enchufismo oscuro propio de Slytherin en que han medrado mis padres, los médicos. Yo no miro a nadie por encima del hombro por lo que mis padres pueden ser o dejar de ser.
PD: ya sé que puede sonar "ofendido", pero no pretende serlo. Es que he cotilleado el grupo de Tuenti y he visto el enlace, y me ha parecido éste un blog lo suficientemente abierto como para decir lo que pienso. Y ya digo, también, que la entrada me ha gustado mucho porque no veo nada de ese resquemor que me pone algo alerta contra este grupo ;)
Muchas gracias Lord Norrington por tu comentario. Estoy de acuerdo contigo en que las opiniones extremas no benefician a nadie. En ningún momento, como veo has notado, mi intención fue desmerecer a la gente que tiene padres universitarios. En muchas de estas páginas se critica con insultos y ofensas... yo no quiero llegar a eso porque no me parece correcto.
ResponderEliminarTodo el mundo tiene derecho a estudiar lo que quiera, tenga los padres que tenga; sólo que para algunos resulta más fácil que para otros. En mi caso, doy las gracias porque a base del esfuerzo "limpiando portales" de mis padres he podido llegar hasta aquí; mientras que otros podrán dar gracias como tú por pasar tardes de quirófano con tu madre o en otros casos por aprender en la oficina de "un tío arquitecto"
Me refiero, que a pesar del nombre de la entrada yo quería resaltar mi agradecimiento a mis padres, no desprestigiar a otros ni mucho menos.
Tengo compañeros con padres médicos, y son de lo más humildes y tampoco les regalan nada.
Pero como en todas las carreras hay gente de todo tipo, y es cierto que todos hemos visto alguna vez algún tipo de enchufismo (que no digo que sea la regla) y como bien dices si no estudias, no entras. Y si no haces un buen MIR no coges plaza. Pero sí he visto como mientras yo hacía las disecciones de anatomía en 2º tirándome horas y horas para que me saliese bien, un compañero venía con su padre y las terminaba en un par de horitas... eso no es justo. Pero bueno, yo aprendí a diseccionar muy bien ! xDD
^^ Gracias por tu opinión!
Miriam, comprendo perfectamente tu pensamiento y lo comparto. Solo permiteme decir que yo soy "sangre limpia", hijo de médico. Fue médico rural casi todo su ejercicio con todo lo que esto supone y, sobre todo, suponía hace 50 años. Nunca he creído tener ningún privilegio pero si la suerte de convivir a todas horas con el ejercicio de la medicina, con la enfermedad y con los enfermos y comprender así que yo no podría hacer otra cosa. Ahora tengo un hijo y una hija médicos. Tampoco "sangre sucia" pero mi orgullo no es ese sino perpetuar la profesión y vivirla hasta la médula de la intimidad de la casa, en las conversaciones y hasta a la hora de comer...aunque, a veces, hablemos solo de simples "marujeos" de los compañeros.
ResponderEliminarUn abrazo y muchas gracias.
Querido Manuel,
EliminarEspero que hayas entendido que el motivo de escribir esta entrada, hace ya casi dos años, fue resaltar la figura de mis padres (y no desmerecer a otros ni mucho menos) y agradecerles que yo haya podido estudiar lo que quería y siempre me han apoyado aún con las dificultades.
Es una suerte como bien dices poder tener la medicina cerca para ver y aprender muchas cosas. Quizá dentro de 50 años sea yo la que tiene un hijito médico o una nieta doctora y les pueda contar anécdotas... ^^
Un abrazo y gracias Manuel.